Los 4 Arquetipos del Hombre Maduro

Basado en el libro de Robert L. Moore, Douglas Gillette

Esta es una visión arquetípica de como el hombre adulto al no haber desarrollado la madurez que le corresponde lleva a su acción adulta características del niño de comportamiento polarizado y como este comportamiento infantil disfrazado con máscara de adulto nos lleva a los hombres a actuar de una manera disfuncional a la cual ya nos hemos acostumbrado y que erroneamente calificamos de exceso de energía masculina, cuando en realidad lo correcto sería apreciarlo como un uso inmaduro de la energía masculina. Por lo tanto cambiar el liderazgo masculino al liderazgo femenino no resuelve el problema de fondo ya que ambos sufren de esta inmadurez.

El padre débil o ausente paraliza la capacidad de sus hijas e hijos para lograr su propia identidad de género y para relacionarse de manera íntima y positiva con los miembros de su propio sexo y del sexo opuesto.

La psicología del niño está en todas partes a nuestro alrededor, y las marcas son fáciles de ver. Entre ellos se encuentran comportamientos abusivos y violentos contra otros, tanto hombres como mujeres; la pasividad y la debilidad, la incapacidad de actuar de manera efectiva y creativa en la propia vida y de generar vida y creatividad en los demás (tanto hombres como mujeres); a menudo, una oscilación entre los dos - abusivo / débil, abuso / debilidad.

Se ha vuelto común escuchar en la actualidad la responsabilidad de la energía masculina y de los hombres en las grandes desgracias de la humanidad causadas por las guerras, la violencia y la búsqueda del poder.

Hoy en día incluso se puede escuchar y ver de manera frecuente en las noticias el abuso que ejercen los hombres sobre las mujeres, actos que llegan incluso al homicidio o feminicidio como se le denomina.

Justamente este aparente exceso de energía masculina no es bien comprendido y es por esto que se piensa que debemos entrar a una nueva era de dominio de la energía femenina. Sin embargo, no se tiene en cuenta que no se puede desarrollar una energía femenina sana sino se desarrolla la energía masculina sana de manera simultánea.

El origen de este mal uso de la energía masculina radica básicamente en la inmadurez del hombre que obviamente trae como consecuencia la inmadurez de la mujer, ya que ambas energías tienen una relación íntima. Basta con ver que en todas estas historias de abuso, pareciese que las mujeres no tienen ninguna responsabilidad, en ese sentido se aprecia a la mujer como víctima, como sujeto pasivo. Esta es una visión machista chaovinista que refuerza la estructura de poder que justamente se cuestiona.

La responsabilidad de esta inmadurez colectiva recae tanto en hombres como en mujeres de la sociedad. Y hay que tener en cuenta que son las mujeres las que crían a los hombres y este es justamente parte del cuadro que es reforzado por la ausencia paterna o la presencia destructiva de la imagen masculina. Esta compleja interacción de deficiencia de madurez, que no es otra cosa que la ausencia de suficiente consciencia, es justamente el foco del problema.

La masculinidad verdaderamente profunda y arraigada no es abusiva. Aquellos atrapados en las estructuras y dinámicas del patriarcado buscan dominar no solo a las mujeres sino también a los hombres. El patriarcado se basa en el miedo: el miedo del niño, el miedo del hombre (inmaduro masculino) a las mujeres, pero también el miedo hacia los hombres. Los niños temen a las mujeres. También temen a los hombres reales. El macho patriarcal no acoge con satisfacción el pleno desarrollo masculino de sus hijos o sus subordinados masculinos como tampoco acoge con satisfacción el pleno desarrollo de sus hijas. Esta es la historia del superior en la oficina que no puede soportar que seamos tan buenos como realmente somos.

Cuanto más bellos, competentes y creativos nos volvemos, más parecemos invitar a la hostilidad de nuestros superiores, o incluso de nuestros compañeros. Lo que realmente nos está atacando es la inmadurez de los seres humanos que están aterrados de nuestros avances en el camino hacia la plenitud del ser masculino o femenino.

En muchos casos, estos hombres seguían siendo abrumados por lo femenino, lo que les faltaba era una conexión adecuada con las energías masculinas profundas e instintivas, los potenciales de la masculinidad madura.

Estructura de los Arquetipos

La desviación de la plenitud de los arquetipos, tanto en su forma inmadura como en su forma madura, se puede considerar como una disfunción bipolar, ya que representa una condición psicológica que no está integrada o cohesionada.

Diferentes arquetipos vienen en línea en diferentes etapas de desarrollo. El primer arquetipo del masculino inmaduro para "potenciar" es el Niño Divino. Luego le siguen el Niño Precoz y el Niño Edípico; y en la última etapa de la infancia está el Niño Héroe. El desarrollo humano no siempre avanza in simultáneo con toda esta energía, por lo tanto hay mezclas de influencias arquetípicas a lo largo del camino.

Así, el Niño Divino, modulado y enriquecido por las experiencias de la vida, se convierte en el Rey; el niño precoz se convierte en el Mago; el niño edípico se convierte en el Amante; y el niño héroe se convierte en el Guerrero.

Descripción de los Arquetipos

El Niño Divino - El rey inmaduro

En la parte superior de la estructura arquetípica triangular, experimentamos al Niño Divino que precede al triángulo del Rey maduro y que es la máxima expresión del niño o energía masculina inmadura, que nos renueva y nos mantiene "jóvenes de corazón". Para los jungianos, este Divino Niño dentro de nosotros es la fuente de la vida. Posee cualidades mágicas, empoderadoras y ponerse en contacto con él produce una enorme sensación de bienestar, entusiasmo por la vida y gran paz y alegría. En la base del triángulo de esta expresión de la niñez, experimentamos las sombras a lo que llamamos el Tirano de Silla Alta y el Príncipe Débil.

El Tirano de silla alta es una versión oscura del niño divino, él es el centro del universo; otros existen para satisfacer sus necesidades y deseos todopoderosos. Se lastima a sí mismo con su grandiosidad, lo ilimitado de sus demandas. Las características de este Tirano incluyen la arrogancia, ser infantil y la irresponsabilidad, incluso para él mismo como un infante mortal que tiene que satisfacer sus necesidades biológicas y psicológicas. Todo esto es lo que los psicólogos llaman inflación o narcisismo patológico.

El Príncipe Débil es el otro lado de la sombra bipolar del Niño Divino. El niño (y más tarde, el hombre) que está poseído por el Príncipe Débil parece tener muy poca personalidad, poco entusiasmo por la vida y muy poca iniciativa. Este es el niño que necesita ser mimado, que dicta a los que lo rodean por su silencio o sus quejas y su impotencia. Todo es demasiado para él. Con frecuencia es hipocondríaco. Todo el sistema familiar gira alrededor suyo. El Príncipe Débil es el polo opuesto al Tirano de Silla Alta , y aunque rara vez hace las rabietas del Tirano, ocupa un trono menos fácil de detectar.

Accediendo al Niño Divino

Para acceder adecuadamente al Niño Divino, necesitamos reconocerlo, pero no identificarnos con él. Necesitamos amar y admirar la creatividad y la belleza de este aspecto primordial del Yo masculino, porque si no tenemos esta conexión con él, nunca veremos sus posibilidades en la vida. Nunca vamos a aprovechar las oportunidades de la innovación y la frescura. La conexión con este arquetipo nos impide sentirnos agotados, aburridos e incapaces de ver la abundancia del potencial humano que nos rodea.

El Niño Edípico - El Amante inmaduro

Todas las energías masculinas inmaduras están excesivamente ligadas, de una manera u otra, a la Madre, y son deficientes en su experiencia de la crianza y la masculinidad madura.

El Niño de Edipo es apasionado y tiene una sensación de asombro y un profundo aprecio por la conexión con sus profundidades internas, con los demás y con todas las cosas. Él es cálido, relacionado, y cariñoso. Su sentido de la unidad mística y la comunión mutua de todas las cosas proviene de su profundo anhelo por la infinitamente bella y buena Madre. Esta Madre no es su verdadera madre mortal. Ella está obligada a decepcionarlo la mayor parte del tiempo en su necesidad de conexión y perfecto e infinito amor y cuidado. Más bien, la Madre que él está sintiendo más allá de lo propio es la Madre divina, la Madre Diosa. En la base del triángulo de esta expresión de la niñez, experimentamos las sombras de el Hijito de mami y el Soñador.

El Hijito de mamá, si no hay un padre, o un padre débil, este llamado impulso de Edipo viene más fuerte, y este lado paralizante de la Sombra bipolar del Niño de Edipo puede poseerlo. A menudo se ve atrapado en perseguir lo bello, lo conmovedor, el anhelo de unión con la Madre que busca de una mujer a otra. Nunca puede estar satisfecho con una mujer mortal, porque lo que está buscando es la diosa inmortal. Él puede estar en la pornografía, buscando a la Diosa en las formas casi infinitas del cuerpo femenino. Algunos hombres bajo este poder coleccionan fotos de mujeres desnudas, solas o teniendo relaciones sexuales con hombres. Busca experimentar su masculinidad, pero en lugar de afirmar su propia masculinidad como hombre mortal, realmente está tratando de experimentar a todas las mujeres, o más bien experimentar la unión con la Diosa Madre en su infinidad de formas femeninas.

El Soñador lleva los impulsos espirituales del Niño Edípico a un extremo. Mientras que el niño que es poseído por la mamá sobreprotectora también muestra signos de pasividad, este al menos busca activamente a la "madre". Sin embargo, el soñador hace que el niño se sienta aislado y desconectado de todas las relaciones humanas. Las relaciones son cosas intangibles y con el mundo de la imaginación dentro de él, logra poco y aparece retraído y deprimido. Lo que este niño realmente muestra de una manera indirecta, es su incapacidad para lograr la posesión de la Madre. Su grandiosidad al tratar de poseer a la Madre se encuentra oculta bajo la depresión del Soñador.

El Héroe - El Guerrero inmaduro

Hay mucha confusión sobre el arquetipo del héroe. El héroe es, de hecho, solo una forma avanzada de la psicología del niño: la forma más avanzada, la cima, en realidad, de las energías masculinas del niño, el arquetipo que caracteriza a los mejores en la etapa de desarrollo adolescente. Sin embargo, es inmaduro, y cuando se traslada a la edad adulta como arquetipo gobernante, bloquea a los hombres de la plena madurez. Si pensamos en el héroe como el matón, este aspecto negativo se vuelve más claro. Lo que hace el Héroe es movilizar las delicadas estructuras del ego del niño para permitirle romper con la Madre al final de la infancia y enfrentar las difíciles tareas que la vida está empezando a asignarle. El héroe permite que el niño comience a afirmarse y se defina a sí mismo como distinto de todos los demás, de modo que, en última instancia, como ser distinto pueda relacionarse con ellos de manera plena y creativa. En la base del triángulo de esta expresión de la niñez, experimentamos las sombras del Déspota y del Cobarde.

El niño (u hombre) bajo el poder del Déspota intenta impresionar a otros. Sus estrategias están diseñadas para proclamar su superioridad y su derecho a dominar a quienes lo rodean. Él reclama el centro del escenario como su derecho de nacimiento. Si alguna vez se cuestionan sus afirmaciones de estatus especial, ¡observe las demostraciones furiosas que le siguen! Asaltará a aquellos que cuestionan su poder con un maltrato verbal y con frecuencia físico. Estos ataques contra otros tienen como objetivo evitar el reconocimiento de su cobardía subyacente y su profunda inseguridad. Este chico no es un jugador de equipo. Él es un solitario. Es un ejecutivo subalterno, vendedor, revolucionario, manipulador del mercado de valores. Él es el soldado que toma riesgos innecesarios en el combate y, si está en una posición de liderazgo, requiere lo mismo de sus hombres.

El niño poseído por el Cobarde, el otro polo de la Sombra bipolar del Héroe, muestra una extrema renuencia a defenderse en enfrentamientos físicos. Por lo general, huirá de una pelea, tal vez se excusó diciendo que es más "masculino" alejarse. Pero se sentirá miserable a pesar de sus excusas. Sin embargo, no solo se evitarán las peleas físicas. Tenderá a dejarse intimidar emocional e intelectualmente también. Él cederá fácilmente a la presión de los demás; Se sentirá invadido y atropellado, como un felpudo. Sin embargo, cuando ya haya tenido suficiente de esto, la grandiosidad oculta del Déspota dentro de él estallará y lanzará un violento asalto verbal y / o físico a su "enemigo", un asalto para el cual el otro no está preparado.

El Niño Precoz - El Mago inmaduro

El niño precoz se manifiesta en un niño cuando está ansioso por aprender, cuando su mente se acelera, cuando quiere compartir lo que está aprendiendo con los demás. Hay un brillo en sus ojos y una energía de cuerpo y mente que muestra que está aventurándose en el mundo de las ideas. Este niño (y más tarde, el hombre) quiere saber el "por qué" de todo. A menudo aprende a leer a una edad temprana para que pueda responder sus propias preguntas. Por lo general, es un buen estudiante y un participante entusiasta en las discusiones de clase. A menudo, este niño también tiene talento en una o más áreas: puede dibujar y pintar bien o tocar un instrumento musical con habilidad. También puede ser bueno en los deportes. El niño precoz es la fuente de los llamados niños prodigios.

A menudo experimenta una poderosa necesidad de ayudar a otros con su conocimiento, y sus amigos a menudo acuden a él en busca de un hombro para llorar, así como de ayuda con su trabajo escolar. El Niño Precoz en un hombre mantiene vivo su sentido del asombro y la curiosidad, estimula su intelecto y lo mueve en dirección al mago maduro. En la base del triángulo de esta expresión de la niñez, experimentamos las sombras del Pícaro tramposo y del niño Tonto.

El Pícaro tramposo es un experto en crear apariencias y luego nos "vende" en esas apariencias. Él seduce a la gente para que le crean, y luego saca la alfombra de debajo de ellos. Nos hace creer en él, confiar en él, y luego nos traiciona y se ríe de nuestra miseria. Él siempre está buscando un incauto. Él es un manipulador. El Sabelotodo es una forma del Pícaro que se encuentra en un niño o en un hombre que disfruta de intimidar a los demás. Puede ser un Sabelotodo sobre cualquier tema o actividad. El niño bajo este poder hace muchos enemigos. Abusa verbalmente de otros, a quienes considera sus inferiores. El Pícaro se activa en nuestro desarrollo cuando somos depreciados y atacados por nuestros padres, cuando nos abusan emocionalmente. Si no sentimos que somos realmente especiales, estaremos bajo el poder del Pícaro y desinflaremos el sentido de ser únicos de los demás, incluso esa deflación no es necesaria. El Pícaro no tiene héroes, porque tener héroes es admirar a los demás. Solo podemos admirar a los demás si tenemos un sentido de nuestro propio valor y un sentido de seguridad en el desarrollo sobre nuestras propias energías creativas …

El niño Tonto (ú hombre) es el que está bajo el poder del otro polo de la disfuncional Sombra del Niño Precoz, el ingenuo Maniquí, como el Príncipe Débil, carece de personalidad, vigor y creatividad. Parece indiferente y aburrido. Parece que no puede aprender las tablas de multiplicar, el recuento de cambios o la hora de contar. Él es frecuentemente etiquetado como un aprendiz lento.

La ineptitud del Tonto, sin embargo, es frecuentemente menos que honesta. Puede captar mucho más de lo que muestra, y su comportamiento parecido al de un tonto puede enmascarar una grandiosidad oculta que se siente demasiado importante (y también muy vulnerable) para venir al mundo. Por lo tanto, íntimamente entrelazado es un Sabelotodo en secreto, el Tonto también es una forma del Pícaro.

El Rey

Podríamos decir que el Rey es el Niño Divino, pero enriquecido y complejo, sabio y en un sentido desinteresado estás cósmicamente involucrado. El arquetipo del Rey se acerca a ser Dios en su forma masculina dentro de cada hombre …

El Rey es el vehículo humano para llevar este arquetipo generativo y ordenador al mundo y a las vidas de los seres humanos.

Las dos funciones del rey en su plenitud

Dos funciones de la energía del Rey hacen posible esta transición de la psicología del niño a la psicología del hombre. Lo primero es ordenar, lo segundo es proporcionar fertilidad y bendición. El rey bueno es el centro de los arquetipos. Vemos en las familias disfuncionales modernas que cuando hay un padre inmaduro, débil o ausente y la energía del Rey no está suficientemente presente, la familia muy a menudo se entrega al desorden y al caos.

El arquetipo del Rey en su plenitud posee las cualidades de orden, de patrón razonable y racional, de integración e integridad en la psique masculina. Estabiliza la emoción caótica y los comportamientos fuera de control. Da estabilidad y centrado. Trae calma. Defiende nuestro propio sentido de orden interno, nuestra propia integridad de ser y de propósito, nuestra propia calma central acerca de quiénes somos y nuestra indiscutible esencial y certeza en nuestra identidad masculina. Ve a los demás en toda su debilidad y en todo su talento y valor. Los honra y los promueve. Los guía y los nutre hacia su plenitud de ser. No es envidioso, porque es seguro, como el Rey, en su propio valor. Recompensa y estimula la creatividad en nosotros y en los demás.

El Rey de las Sombras - El Tirano y el Alfeñique

En general, debemos confesar que tenemos muy poca experiencia acerca de la energía del Rey en su plenitud. Es posible que lo hayamos sentido en pedazos, pero lo triste es que esta energía positiva carece desastrosamente en la vida de la mayoría de los hombres.

Principalmente, lo que hemos experimentado es lo que llamamos el Rey de las Sombras.

El Rey de la Sombra se forma en un sentido cuando los padres abusaron del bebé/niño y atacaron su grandiosidad y gloria desde el principio. La grandiosidad del Niño divino se polariza en el Tirano de Silla Alta y cae en el inconsciente del niño para tenerlo a salvo.

La estructura de la sombra bipolar pasiva/activa del Rey de las Sombras son el Tirano en el polo activo y el Alfeñique en polo pasivo.

El Tirano

Narcotraficantes, proxenetas, jefes de la mafia, ejecutivos interesados ​​en avanzar en su carrera en lugar de ser buenos administradores del "reino" colocado bajo si autoridad, sin devoción ni lealtad real a la compañía. Este es el CEO que negocia, para su propio beneficio financiero, para vender su compañía, para verla desmembrada e impotente, quien está dispuesto a ver a sus amigos y empleados leales despedidos como si fuesen exceso de lastre. El Rey Tirano se manifiesta en todos nosotros de un momento a otro cuando nos sentimos empujados al límite, cuando estamos agotados, cuando nos estamos inflando. Pero, lo vemos más comúnmente en personas con trastorno de personalidad narcisista. En lugar de ser un espejo para los demás, ellos buscan insaciablemente el reflejo de ellos en los demás. En lugar de ver a los demás, buscan ser vistos por ellos.

El Alfeñique

La presencia oculta de este polo pasivo explica el hambre por el reflejo, hambre por ser adorado, "¡Mira lo importante que soy!", Lo que sentimos de muchos de nuestros superiores y amigos. Esto explica sus arrebatos de ira y sus ataques contra aquellos a quienes consideran débiles, es decir, aquellos sobre quienes proyectan su propia debilidad interna.

El hombre poseído por el Alfeñique carece de concentración, calma y seguridad dentro de sí mismo, y esto también lo lleva a la paranoia. El hombre poseído por el Rey de las Sombras bipolar tiene mucho que temer, de hecho, porque sus comportamientos opresivos, que a menudo incluyen la crueldad, piden una respuesta hacia su propia majestuosidad de los otros. Tanto el Tirano como el Alfeñique tienen una paranoia de “Consíguelo antes que te atrapen”que es destructiva del propio sentido de calma y orden, trabaja para destruir el propio carácter y el de los demás.

El Guerrero

Vivimos en una época en que las personas generalmente se sienten incómodas con la forma de energía masculina de Guerrero, y por algunas buenas razones. Las mujeres, especialmente, se sienten incómodas con él, porque a menudo han sido las víctimas más directas en su forma de sombra. Pero creemos que el Guerrero no debe identificarse con la ira humana de una manera simple, sino todo lo contrario. Es un ingrediente vital en la construcción de nuestro mundo y desempeña un papel importante en la extensión de los beneficios de las más altas virtudes humanas y logros culturales a toda la humanidad.

El guerrero en su plenitud

Las características del Guerrero en su plenitud equivalen a una forma total de vida. La agresividad es una postura hacia la vida que despierta, energiza y motiva. Nos empuja a tomar la ofensiva y salir de una posición defensiva o de "mantener" las tareas y los problemas de la vida. La agresividad adecuada, en las circunstancias correctas, circunstancias estratégicamente ventajosas para el objetivo en cuestión, ya es la mitad de la batalla. El Guerrero sabe a través de la claridad de pensamiento, a través del discernimiento. El guerrero está siempre alerta. Él siempre está despierto. Él nunca está durmiendo en la vida. Él sabe cómo enfocar su mente y su cuerpo. Un guerrero sabe lo que quiere, y él sabe cómo obtenerlo. En función de su claridad mental, es un estratega y un táctico. El puede evaluar las circunstancias con precisión y luego adaptarse a la "situación sobre el terreno".

Cuando el Guerrero está conectado con el Rey, el hombre que accede a estos poderes está administrando conscientemente el "reino" y sus acciones decisivas, claridad de pensamiento, disciplina y coraje son, de hecho, creativas y generativas.

Cuando el Guerrero está conectado con el Mago, esto es lo que le permite a un hombre lograr tal dominio y control sobre sí mismo y sus "armas". Es lo que le permite canalizar y dirigir el poder para lograr objetivos.

Cuando el Guerrero está conectado con el Amante, le da compasión y un sentido de conexión con todas las cosas. El Amante hace que el guerrero sea compasivo al mismo tiempo que cumple con su deber. Incluso cuando accede al Guerrero positivo, operar por su cuenta sin el Rey, el Mago o el Amante puede ser desastroso.

El Guerrero de la sombra - El sádico y el masoquista

El Guerrero como espíritu vengador entra en nosotros cuando estamos muy asustados y muy enojados. Una especie de sed de sangre, viene sobre los hombres en la situación estresante del combate real, como nosotros, como en otras situaciones estresantes de la vida.

Junto con esta pasión por la destrucción y la crueldad va un odio hacia los "débiles", los indefensos y vulnerables (en realidad, el propio masoquista oculto del sádico).

Puede parecer improbable al principio, pero la crueldad del guerrero sádico está directamente relacionada con lo que está mal con la energía del héroe; Hay similitudes entre el Guerrero de las Sombras y el Héroe. El Guerrero de la Sombra lleva a la adultez la inseguridad adolescente, el emocionalismo violento y la desesperación del Héroe en su lucha por el poder abrumador de lo femenino, que siempre tiende a evocar el polo masoquista o cobarde de la Sombra disfuncional del Héroe.

Todos nosotros, sin importar el camino de la vida, podemos caer bajo el poder de la Sombra bipolar del Guerrero en cualquier área de nuestras vidas. Puede ser que no sepamos cuándo dejar una relación imposible, un círculo de amigos o un trabajo frustrante. Todos conocemos el dicho "Renuncia cuando estés adelante" o "Aprende a reducir tus pérdidas". La personalidad compulsiva, no importa cuáles sean las señales de peligro, no importa lo imposible que sea el sueño y el enemigo imbatible, profundiza y trabaja más duro , tratando de obtener sangre de un nabo y viendo su oro convertirse en cenizas al final. Si estamos bajo el poder del masoquista, nos someteremos a demasiado abuso durante demasiado tiempo y luego explotaremos en un estallido sádico de violencia verbal e incluso física.

El Mago

El Mago es el conocedor y él es el maestro de la tecnología. Cualquiera que sea su título, su especialidad es saber algo que otros no saben. El mago es capaz de iniciarse a sí mismo y a los demás en la práctica de la tecnología. El mago humano es siempre un iniciado, y una de sus tareas es iniciar a los demás. El Mago es un iniciado de conocimiento secreto y oculto de todo tipo. Y este es el punto importante. Todo el conocimiento que requiere entrenamiento especial para adquirirse corresponde a la energía del mago. El mago puede comprender la dinámica oculta de la psique humana y, por lo tanto, puede manipular a otros seres humanos, para bien o para mal (psicología). Puede predecir el clima (meteorología). Él tiene conocimiento de hierbas medicinales y venenos (medicina) ... Es para él que la gente acude con sus preguntas, problemas, dolores y enfermedades del cuerpo y la mente.

El Mago en su plenitud

La energía del mago es el arquetipo de la conciencia y de la revelación, principalmente, pero también del conocimiento de cualquier cosa que no sea inmediatamente aparente o de sentido común. "Observa el Ego". Su función principal es retroceder y observar, explorar el horizonte, monitorear los datos provenientes tanto del exterior como del interior y luego, - de su sabiduría, su conocimiento del poder, dentro y fuera de él y con su habilidad técnica para canalizar - tomar las decisiones de la vida necesarias.

El mago, entonces, es el arquetipo de la reflexión. Y, debido a eso, también es la energía de la controversia. Lo que entendemos por introversión no es la timidez, sino la capacidad de separarse de las tormentas internas y externas y de conectarse con profundas verdades y recursos internos. Los introvertidos, en este sentido, viven mucho más de sus centros que otras personas. La energía del mago, al ayudar a la formación del eje yo espíritu - yo ego, es inamovible en su estabilidad, concentración y desapego emocional. No es fácil de empujar y tirar ... El mago a menudo mantiene la línea en una crisis.

El Mago de las sombras: El manipulador

Está detrás de los ministerios de propaganda, las reuniones informativas de prensa controladas, las noticias censuradas y los mítines políticos artificialmente orquestados que se encuentran manejados por el Mago como manipulador. Un hombre bajo esta Sombra no guía a los demás, como lo hace un Mago maduro; Él los dirige de tal manera que no permite que puedan ver detrás. Maneja a las personas ocultándoles la información que puedan necesitar para su propio bienestar. Cobra fuertemente por la poca información que da, que suele ser suficiente para demostrar su superioridad y su gran aprendizaje. El Mago de las Sombras no solo es desapegado, también es cruel.

El Mago de las Sombras: El pobre "Inocente"

El polo pasivo de la Sombra del mago es lo que llamamos el ingenuo o "inocente". El "Inocente" es un remanente desde la infancia hasta la edad adulta del polo pasivo de la Sombra del Niño Precoz: el Tonto. El hombre poseído por el "Inocente" quiere el poder y el estatus que tradicionalmente le llega al hombre que es un mago, al menos en los campos sancionados por la sociedad. Pero él no quiere asumir las responsabilidades que pertenecen a un verdadero mago. Él no quiere conocerse a sí mismo, y ciertamente no quiere hacer el gran esfuerzo necesario para adquirir la habilidad de contener y canalizar el poder de manera constructiva. Él quiere aprender lo suficiente para descarrilar a aquellos que están haciendo esfuerzos que valen la pena.

El Amante

Los jungianos a menudo usan el nombre del dios griego Eros para hablar sobre la energía del Amante. También utilizan el término latino libido.

Por estos términos, significan no solo apetitos sexuales sino un apetito general por la vida.

Creemos que el Amante, con cualquier nombre, es el patrón de energía primordial de lo que podríamos llamar vivacidad, vitalidad y pasión. Vive a través de las grandes hambres primarias de nuestra especie. Hambre por el sexo, la comida, el bienestar y la reproducción, la adaptación creativa a las dificultades de la vida y, en última instancia, un sentido de significado, sin el cual los seres humanos no pueden continuar con sus vidas. El impulso del amante es satisfacer esas hambres.

El arquetipo del amante es además primordial para la psique humana porque es la energía de la sensibilidad al entorno exterior. El amante también supervisa las texturas cambiantes del mundo psicológico interno a medida que responde a las impresiones sensoriales entrantes.

El amante en su plenitud

El Amante es el arquetipo del juego y la exhibición de una encarnación saludable, de estar en el mundo del placer sensual y en el propio cuerpo sin vergüenza. Por lo tanto, el amor es profundamente sensual, sensualmente consciente y sensible al mundo físico en todo su esplendor. El Amante está relacionado y conectado con todos ellos, atraído hacia ellos a través de su sensibilidad. Su sensibilidad lo lleva a sentirse compasivo y empáticamente unido a ellos. Para el hombre que accede al Amante, todas las cosas están unidas entre sí de maneras misteriosas ... No es solo que la energía del Amante ve el mundo en un grano de arena.

Él siente que esto es así.

Junto con la sensibilidad a todas las cosas internas y externas viene la pasión. La conexión del Amante no es primariamente intelectual. Es a través del sentimiento. Las hambres primarias se sienten apasionadamente en todos nosotros, al menos debajo de la superficie. Pero el Amante sabe esto con un profundo conocimiento. Estar cerca del inconsciente significa estar cerca del "fuego": de los fuegos de la vida y, a nivel biológico, de los fuegos de los procesos metabólicos que engendran la vida. El amor, como todos sabemos, es "caliente", a menudo "demasiado caliente para manejarlo".

El amante de la sombra: El adicto y el amante impotente

Un hombre que vive en cualquiera de los polos de la Sombra del Amante, como un hombre que vive en cualquiera de las formas de sombra de las energías masculinas,

es poseído por la misma energía que podría ser una fuente de vida y bienestar para él, si se accede de manera apropiada. Sin embargo, mientras esté poseído por el Amante de las Sombras, la energía funciona para su destrucción y la destrucción de los demás a su alrededor.

El amante adicto

La característica principal y más profundamente perturbadora del Amante de las Sombras es ser adicto a la perdida. Se pierde en un océano de sentidos. Las impresiones más leves del mundo exterior son suficientes para alejarlo del centro. Se ve arrastrado a la soledad de un silbato de tren en la noche, a la devastación emocional de una pelea en la oficina, a los aduladores de las mujeres que se encuentra en la calle. Tirado primero de una manera y luego de otra, él no es el amo de su propio destino. Se convierte en víctima de su propia sensibilidad. El Amante adicto vive las historias de las llamadas personalidades adictivas: personas que no pueden dejar de comer, beber, fumar o usar drogas ... Esas personas pueden morir fácilmente al final, perdidas en la química y adicción emocional.

Aquí es donde vemos el síndrome de Don Juan, y donde podemos tocar la base con el tema de la monogamia / promiscuidad nuevamente. La monogamia se puede ver como el producto del arraigo profundo de un hombre centrado. Está limitado, no por reglas externas, sino por sus propias estructuras internas, su propio sentido de su bienestar y calma masculinos, y su propia alegría interna.

Amante impotente

¿Qué sucede cuando sentimos que estamos fuera de contacto con el Amante en su plenitud? Entonces somos poseídos por el amante impotente. Experimentaremos nuestras vidas de una manera insensible. "Sentiremos" la esterilidad y la llanura. Describiremos los síntomas que los psicólogos llaman "afecto aplanado": falta de entusiasmo, falta de vivacidad, falta de vitalidad.

Es posible que tengamos problemas para levantarnos por la mañana y problemas para dormir por la noche. Podemos encontrarnos cada vez más alejados de nuestra familia, nuestros compañeros de trabajo y nuestros amigos. Podemos sentir hambre pero falta el apetito. En definitiva, nos deprimiremos.

Las personas que habitualmente están poseídas por el amante impotente están deprimidas crónicamente. Sienten una falta de conexión con los demás, y se sienten aislados de sí mismos.